domingo, 22 de mayo de 2011

Yo, que te di todas mis noches a vos, sin lamentos ni reproches.
Te di, en las noches y los días, mis mejores melodías en
Las olas más tremendas de mi vida.
Yo te espero todavía, yo creo que el olvido es una fantasía.
Y así, destinado a padecerte sigo loco como siempre,
Inventando lo que sea para verte.

En un rincón de mi memoria, sobran noches de tristeza,
Poca gloria, y soledad.
Y en el hueco de los años más dorados caben tus ojos
Prestados y un adiós para olvidar.
Pastillitas del olvido, tengan el recuerdo vivo